El pueblo israelí pide la renuncia del primer ministro, Benjamin Netanyahu, por su gestión durante la crisis que dejó la pandemia de coronavirus.
Las protestas no se detienen en Israel.
Miles de israelís volvieron a salir hoy a las calles para pedir la renuncia del primer ministro, Benjamin Netanyahu, por su gestión durante la pandemia de coronavirus. Es el décimo día consecutivo que Israel sale a las calles para protestar contra el primer ministro.
La concentración con mayor cantidad de personas fue en la residencia oficial del funcionario, que se encuentra ubicada en la ciudad de Jerusalén. Según el diario local Haaretz, alrededor de 200.000 personas estuvieron en las inmediaciones de donde habita el primer ministro. También otras partes del país, participaron de las manifestaciones.
La policía, sin la misma represión que hubo en las anteriores ediciones, estuvo presente para llevar la tranquilidad a Netanyahu y a todos los participantes de la marcha.
Quienes piden la dimisión de Netanyahu critican su gestión de la pandemia de coronavirus en medio de una fuerte segunda ola de contagios y un alza de la tasa de desempleo por encima de 20%, así como el hecho de que está procesado por corrupción.
Además, el primer ministro es cuestionado por el reciente acuerdo que firmó con Emiratos Árabes Unidos, la demora en ejecutar su plan de anexar unos asentamientos en Cisjordania -por lo que Netanyahu responsabilizó a Estados Unidos- y la sospecha de que intentó forzar un llamado a elecciones tras algunos desacuerdos dentro de la coalición gobernante.