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El atacante nació en Yaundé, la capital de Camerún. Fue el autor del único tanto para el triunfo de Suiza por 1-0 en el debut del Mundial de Qatar 2022.
El Mundial siempre da sorpresas. Este jueves, en el comienzo del camino de Suiza en Qatar 2022, venció por 1-0 a Camerún con el gol de Breel Embolo. El delantero convirtió su primer tanto, no lo festejó y pidió disculpas porque nació en Yaundé, la capital del país africano hace 25 años.
Cuando tenía cinco años, sus padres se separaron y Embolo decidió irse a vivir con su madre a Francia, que meses después conocería a un suizo y se iría a vivir a Basilea. A los seis, junto a su hermano, decidió comenzar a jugar al fútbol y lo hizo en el Basel, uno de los equipos más importantes del fútbol helvético.
Luego de hacer las inferiores, el 13 de marzo de 2014, con 17 años, hizo su debut ante el Red Bull Salzburgo de Austria en un partido de la UEFA Europa League. En el siguiente partido, en la Superliga de Suiza, entró cuando faltaban cinco minutos y anotó su primer gol ante el Aarau.
Por su buena actuación, la Asociación Suiza de Fútbol decidió nacionalizarlo. Embolo aceptó el pedido de los entrenadores de las inferiores de la selección y comenzó su ciclo como jugador suizo en las juveniles.
Luego de su paso por el Basel, Embolo fue transferido al Schalke 04 y al Borussia Mönchengladbach, ambos equipos de la liga alemana. En julio, después de seis años en el fútbol germano, el Monaco, de Francia, lo compró y firmó por cuatro temporadas.
Pese a los cambios de técnicos, su carrera en la selección de Suiza siguió sin complicaciones. Para este Mundial, Murat Yakin, el entrenador del combinado helvético, decidió ponerlo de titular y desplazar al banco a Haris Seferovic, quien jugó los últimos dos mundiales y es uno de los atacantes más importantes del país.
Embolo había jugado la Eurocopa 2016, el Mundial de Rusia 2018 y la Eurocopa 2020, en la cual convirtió un tanto. Pero le faltaba marcar en una cita mundialista. En la previa al partido la prensa había consultado que iba a hacer si era el autor de un gol ante Camerún, su país natal. Él aclaró que no lo iba a festejar, pese a que sea su primer tanto en una Copa del Mundo.
Cuando el reloj marcaban los tres minutos del segundo tiempo, Breel Embolo convirtió el único tanto de la victoria de Suiza. Automáticamente pidió disculpas y no festejó el tanto, situación que es atípica en los seleccionados a diferencias de los clubes.
El primer tanto de un jugador, ya sea con su club o con su selección, siempre queda en el recuerdo. En este caso, Embolo, como titularon varios medios de Europa «el goleador triste», nunca olvidará el jueves 24 de noviembre.
